jueves, 3 de diciembre de 2009

Un sueño solidario

Por Claudio Pronesti


En 1996, Margarita Barrientos creyó posible su sueño solidario. Oriunda de Santiago del Estero, huérfana desde los nueve años y con un espíritu de lucha inquebrantable, esta mujer que vivía del cirujeo junto a su marido y diez hijos, decidió que aún bajo dichas condiciones podía ayudar a sus pares de la Villa Los Piletones, ubicada en el Sur de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Su obra comenzó de la mano del comedor Los Piletones, que alimentaba en un principio a 15 niños y un anciano vecino, en tiempos en los que no recibió ningún tipo de donaciones y todo era fruto de su trabajo. En 1999 fue elegida Mujer del Año por su labor solidaria, y desde allí la catarata de premios y reconocimientos fue incesante.

Trece años después, el comedor se transformó en la Fundación Margarita Barrientos: cuenta con una guardería, el Centro de Salud "Ángela Palmisano", un Centro de Día para abuelos y aspira a seguir sumando servicios para su comunidad.

Conocé a Margarita, motor de esta cruzada solidaria.

Vale la pena. Te lo aseguramos.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Bailando y animando los 90

Por Verónica Fernández Ceriani

Pensá en algún programa infantil de los 90. Ahora pensá en un programa de actualidad -sí, la de los 90-. Ahora pensá en uno de entretenimientos. Seguramente, nuestra entrevistada de hoy estuvo en alguno de ellos.

Daniela Fernández empezó su carrera televisiva como bailarina en la obra Vivitos y coleando con Hugo Midón. Desde ese entonces recorrió los 90 de punta a punta en programas que nos marcaron a todos los que crecimos en esa época. Después de Vivitos y coleando fueron Fax, 360, Colores, Reina en Colores, Nico, Decime cuál es tu nombre, Patas para arriba y Locos por el fútbol. Así, supo convertirse en una cara infaltable dentro de todo recuerdo noventoso, ya sea acompañando o al frente de un programa. En 1995 se llevó el Martín Fierro Revelación por el exitoso móvil de Nico, que llegaba a reunir a miles de personas en cada barrio de la ciudad. En la escuela de danza y comedia musical que encabeza -El Centro-, recibió a Delosnoventas y nos habló del pasado y la actualidad de su carrera y la televisión.


lunes, 30 de noviembre de 2009

Mariela Muñoz, abrir el juego hacia la igualdad

Por Sabrina Campos

La historia de Mariela Muñoz salió a la luz en Diciembre de 1993 cuando el Juez de Menores de Quilmes, Pedro Entío, decidió anular las partidas de nacimiento de los dos mellizos y la nena que ella criaba desde su nacimiento y que había anotado como propios. Lo que siguió fueron meses en prisión, y una larga recorrida por los medios y juzgados con el único objetivo de lograr un régimen de visitas que le permitiera ver a quienes ella aun hoy considera sus hijos.

En 1997 Muñoz consiguió, en un caso sin precedentes, la identidad femenina luego de que las pericias psicológicas demostraran que su sexo psicológico era femenino desde la infancia y anterior a la intervención quirúrgica que se realizara en Chile en 1981.

El logro no fue sólo a nivel personal, sino que posibilitó un debate más serio y profundo sobre derechos de los homosexuales, travestis y transexuales de forma seria, con el apoyo y reconocimiento de estos por parte de los comunicadores y la opinión pública.
Su historia fue incluso llevada al teatro en Suiza –llamada ¿Qué pasó con Daniela Duñoz?- dirigida por el realizador argentino Marcelo Díaz.

De Los Noventas te invita a recordar su historia, contada por la protagonista.

Boby Goma y Nivel X: dos hitos al precio de uno

Coderas, rodilleras, anteojos grandes y mucho coraje - rozando con la locura -. Todo eso reunía Boby Goma, uno de los personajes que marcaron los comienzos de los 90's a través de éxitos televisivos como Ritmo de la noche y Videomatch.
En 1997, el actor y creador de tan despistado y entrañable personaje, se convirtió en la cara visible del programa que, desde la pantalla del canal de cable argentino Magic Kids, envició a los incipientes gamers de aquellos días: Nivel X.

Lionel Campoy, el hombre detrás de ambos íconos de la década, te habla en esta video-entrevista de una partecita de eso que venís a buscar a este blog... los noventas.


El ganador de los 90

Por Verónica Fernández Ceriani

Es momento de sincronizar los relojes y viajar en el tiempo hacia los años 90 para encontrarnos nada más y nada menos que con Parker Lewis.

El simpático personaje, paradójicamente un ganador total con todas las características de un loser, llegó a la pantalla chica en el año 1990 en Estados Unidos, aunque en la Argentina pudimos conocerlo varios años después, cuando la serie original había dejado de emitirse en su país de origen -1993-. Así fue que entre 1994 y 1996 muchos nos encariñamos con un grupito de adolescentes un poco raros, y un formato de sitcom súper novedoso para la época, gracias al manejo de cámaras, la edición impecable y el aporte de un libreto que rozaba lo surrealista.

El personaje principal, Parker Lloyd Lewis -encarnado por Corin Nemec- , fue uno de los primeros en usar la expresión “nota mental”, y se paseaba por el colegio Santo Domingo luciendo sus infaltables Converse y sus camisas necesariamente grandes y coloridas, siempre inquieto, planeando y fantaseando. Y también siempre secundado por su “pandilla”, integrada por la mole Kubiac, el rockero Mickey Randall y el clásico nerd superdotado Jerry SteinerAbraham Benrubi, Billy Jayne y Troy W. Slaten respectivamente-.


Los pasatiempos preferidos del equipo en cuestión se resumían básicamente en urdir un plan para todo, ya sean misiones o travesuras, poniéndolo en marcha al grito de “sincronicen sus relojes”. Aunque la muletilla por excelencia de Parker, el más cool, el líder, “el ganador” –como se lo presentaba en sus emisiones argentinas- no era otra que “no es problema”, rara vez lograban eludir la eterna vigilancia de Shelly –la hermana menor y maquinadora de Parker, Maia Brewton- y la por siempre premenstrual señorita Musso, directora del colegio –Melanie Chartoff-.

La sitcom, que finalizó luego de tres temporadas y 73 episodios producidos por Columbia Pictures, no llegó a verse ni completa ni cronológicamente en la Argentina, por lo que el rating de la misma comenzó a mermar, sentencia absoluta para ser cancelada. A pesar de haberse alzado con ocho nominaciones en los Young Artist Awards por la actuación de sus protagonistas, ninguno resultó ganador; lo que sí se ganaron fue una canción compuesta por Fall out boy, incluida en el primer álbum de la banda e inspirada en la serie.

Por supuesto, todavía hoy muchos la extrañamos, y en la web pueden encontrarse dando vueltas algunas peticiones para que la compañía productora lance la colección completa de DVDs de Parker Lewis can’t lose. Con una mano en el corazón… si la recordás, ¡no nos digas que no la comprarías!


lunes, 23 de noviembre de 2009

Lust for life

Por Julieta Roffo


"Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un puto televisor grande, elige lavadoras, coches, equipos de compact disc y abrelatas eléctricos. Elige la salud, colesterol bajo y seguros dentales. Elige pagar hipotecas a interés fijo. Elige un piso piloto. Elige a tus amigos. Elige ropa deportiva y maletas que hagan juego. Elige pagar a plazos un traje de marca en una amplia gama de putos tejidos. Elige el bricolage y preguntarte quién carajo eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver teleconcursos que emboban la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de puta comida basura. Elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable siendo una carga para los niñatos egoístas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. Elige tu futuro. Elige la vida. ¿Pero por qué iba yo a querer hacer algo así?. Yo elegí no elegir la vida. Yo elegí otra cosa. ¿Y las razones? No hay razones. Quién necesita razones cuando tienes heroína...".

Todo eso, en un inglés británico que no tiene nada que ver con el de Hugh Grant, declara Mark Renton mientras escapa junto a uno de sus amigos por las calles de la Edimburgo (Escocia). La banda sonora de la huida: Lust for life, compuesta por Iggy Pop y David Bowie. Así empieza Trainspotting, una de las películas más emblemáticas de los 90's.

Dirigida por el inglés Danny Boyle (Slumdog Millionaire, La Playa), la película está basada en la novela homónima de Irvine Welsh, que le valió críticas como "Merece vender más ejemplares que la Biblia" en la revista escocesa Rebel Inc. o "Una novela que es el equivalente literario de una bomba de hidrógeno" en The big spoon.

En el cine, se estrenó en
1996, planteando la historia de un grupo de amigos heroinómanos que, en una ciudad plagada de desempleo, prostitución y sobre todo sida, sólo se preocupan por conseguir sus drogas, descreen absolutamente del futuro y se niegan a caer en las problemáticas masivas del mundo que los rodea - y con el que se enfrentan, aunque sea por omisión -.


La filosofía de su vida, repleta de trenes, botellas, mujeres, fútbol y agujas, y resumida a la perfección en las palabras del personaje de Ewan McGregor, es el eje de una historia en la que la crudeza tanto visual como en los diálogos no se hace esperar.


Una de las novedades de la película, cuyo nombre tiene que ver por un lado con el hábito de sentarse a ver los trenes pasar y por otro con la búsqueda de una vena apta para la inyección, fue que el enfoque se situó en la visión del adicto, y no en la típica visión de la sociedad hacia él. Para eso, la desesperación por encontrar una dosis o los efectos inmediatos de la droga recién ingresada al torrente sanguíneo fueron narrados en escenas que han quedado plasmadas en la historia del cine, siempre acompañadas de una banda sonora lujosísima que incluyó a Bowie, Pop, Lou Reed, Brian Eno, Pulp, Blur, Underworld y Joy Division, entre otros.


Apenas estrenada la película, que fue promocionada mediante volantes y con carteles de cada uno de los personajes
(Renton, Begbie, Spud y Sick Boy son los principales), la polémica no tardó en llegar: se dijo principalmente que fomentaba el uso de drogas entre los más jóvenes.


La estética y la temática del film lo situaron rápidamente entre las películas británicas más aclamadas de todos los tiempos, y lo convirtieron en una obra de culto, más allá de la década del 90.

Es que el secreto de Trainspotting no es descubrir un mundo nuevo, ni contar una historia completamente desconocida. Sino mostrar lo que pasa todos los días, en todos lados, lo que está ahí, pero no queremos ver. En un par de oraciones, en menos de dos minutos, el paradigma habitual - y conveniente - se derriba y entonces hay que poner atención, aunque sea por un rato, en lo que está más allá de la agenda.


Ahora sí, para que no te quedes con las ganas:

La novela se baja de acá; la banda sonora de acá (Vol. 1) y de acá (Vol. 2). Y, la frutilla del postre, la película bajala de acá (y ponele subtítulos, claro).




EL CHICO BUENO CONTRA EL CHICO MALO

Por Claudio Pronesti


RITMO DE LA NOCHE Vs HACELO POR MI


A principios de los noventas, cuando estar por Juntos por Telefé era muy bueno y el Canal 9 de la palomita del Zar Alejandro Romay era todavía uno de los “grandes” de la televisión argenta, dos jóvenes tan distintos como magnéticos se debatía a duelo durante seis de los siete días televisivos de la semana.


Parados desde un comienzo en las antípodas, Marcelo Tinelli y Mario Pergolini nunca se quisieron demasiado. Un poco por ser distintos entre si, y mucho también por ser ambos funcionales a una polémica que los beneficiaba a los dos, durante aquellos tiempos – y aun hoy – el chico bueno del canal de las pelotas, y el rebelde de la pantalla del 9, comenzaron uno de los duelos mas famosos de la historia de la televisión argentina.

De un lado, Tinelli encarnaba al gomazo familiero querido por las madres y amigo de las buenas costumbres que aún perduraban de los años ochenta: era el “niño bueno” de la televisión, y de la mano de su “Ritmo de la Noche”, acaparaba el rating de la noche de los domingos, luchando mano a mano por el liderazgo de la pantalla contra el tanque de Canal 13, “Fútbol de Primera”, que por aquellos años gozaba de la libertad de “secuestrar los goles hasta los domingos hasta las 22 horas”, tal como rezó la presidenta Cristina Fernánndez de Kirchner cuando dictaminó el “Futbol para Todos” de estos tiempos.

Por su ciclo, pasaron artistas de la talla de Xuxa, Ricardo Montaner, Luis Miguel, el “Puma” José Luis Rodríiguez y todo tipo de estrellas melódicas de la época, aunque también fueron participes Charly Garcia, Mercedes Sosa, Gustavo Cerati y hasta los internacionales Boy George y los Duran Duran.

Entre los hitos del programa se recuerdan la visita del por entonces joven e ignoto Ricky Martin, quien debuto en los escenarios argentinos en el programa del cabezón más famoso y la caótica actuación de POISON, destrucción de la escenografía mediante.
Del otro, Pergolini encarnaba al chico malo, el rebelde al que todas las madres querían lejos de los dormitorios de sus hijas. Parado en la vereda rocker de los domingos, desde su “Hacelo x Mí” sonaban bandas del rock argentino como ATTAQUE 77 (quien dio nombre al programa con su tema homónimo), aunque nadie olvida la visita de ROXETTE.




Casi veinte años después, y lejos de aquellas noches de domingo que servían de bonus track para que ambos – sobre todo Mario – desplegaran toda su verba contra el otro más allá del debate que de lunes a viernes sostenían desde “VideoMatch” y “La TV Ataca” (noventosos, estos ciclos quedan para otro posteo, tranquilos), tanto uno como el otro se transformaron en exitosos empresarios de la televisión.

Tinelli sigue liderando la pantalla con todo tipo de formatos que incluyen baile, canto, enanos, niños y demás, en tanto que Pergolini eligió retirarse en 2008 de la televisión tras varias temporadas al frente de “Caiga Quien Caiga” para dedicarse a su verdadera pasión, la radio. Sin embargo, cada tanto se siguen cruzando en duelos verbales que alimentan la vieja pelea del chico malo versus el chico bueno. Aquí, algunas muestras…….que lo disfruten.






domingo, 22 de noviembre de 2009

Lo que viene en De Los Noventas

Esta semana no te pierdas la cobertura especial de la vuelta de Vilma Palma e Vampiros.
El retorno de un clásico de nuestra década, en el Blog más Noventos de todos!
Y para ir poniéndonos a tono, les dejamos uno de los mayores éxitos de la banda: Auto Rojo.


viernes, 20 de noviembre de 2009

¿Qué vamos a hacer esta noche Cerebro? Lo mismo que todas las noches Pinky, tratar de conquistar al mundo

Por Sabrina Campos

Dos ratones.
Dos ratones albinos.
Dos ratones albinos genéticamente modificados.
Dos ratones albinos genéticamente modificados que intentan conquistar al mundo.

No hace falta decir más para que cualquier noventoso de ley sepa que estamos hablando de Pinky y Cerebro.


Todos los sábados me levantaba a media mañana, me hacía la leche y con la tele fija en Cartoon Network, quedaba hipnotizada durante casi media hora con los planes estrambóticos que Cerebro elucubraba y que Pinky seguía sin entender demasiado porqué. Recuerdo que mi mamá también los miraba con interés y ahora puedo entender porqué.


Lejos de ser sólo un dibujito para chicos, Pinky y Cerebro mezclaba el humor efectista de la comedia de enredos en las que todo sale (siempre) mal, con diálogos sólidos, repletos de sarcasmo e ironías, con participaciones especiales y reminicencias a películas. Esos guiños que sólo un público con años de carrera agarra al vuelo.

La serie producida por Steven Spielberg junto a Warner Animation, se independizó de la histriónica Animaniacs en 1995 y conquistó al mundo con estos dos ratones que desde una jaula situada en los laboratorios ACME trataban de alcanzar justamente ese cometido. La recepción del público fue inmediata y la crítica los acompañó incluso otorgándoles el Emmy a Mejor Serie Animada en 1999.

Cerebro era genio detrás de los planes maquiavélicos , el que con su cola zigzagueante abría la puerta para ir a jugar al mini teg roedor que re -comenzaban todas las noches. Con su tono grave inspirado en la inconfundible voz de Orson Wells emprendía su propia guerra de los mundos antes de cada amanecer.




La pareja despareja se completaba con Pinky, también alterado genéticamente pero con resultados al menos llamativos. Era torpe, un poco tonto y bastante loco, pero siempre se lo veía disfrutando y pasándola bien en los 22 minutos que duraba cada capítulo, aunque Cerebro se encargara de maltratarlo, desmerecerlo y culparlo de todos sus fracasos. "Narf", una de las tantas palabras inexistentes que decía Pinky, quedará siempre en la memoria de todos sus seguidores.


Participaciones memorables

Si bien las 65 emisiones de la serie son excelentes, cabe destacar algunos capítulos que contaron con participaciones especiales.
Uno de los mejores es, sin duda, cuando los ratones conocen a Los Beatles, titulado "All you need is Narf", jugando claramente con uno de los más conocidos temas de la banda (All you need is love) y la palabra inventada que Pinky repetía hasta el cansancio.

En este episodio los ratones viajan a la India para recolectar sándalo, que era un ingrediente escencial de otro de sus planes para tratar de conquistar al mundo. En medio del viaje, se dan cuenta de que los hindúes confunden a Pinky con el Mous-arishi (en referencia all Maharishi Mahesh Yogi hindú) y comienzan a idolatrarlo cual vaca sagrada. Atraídos por la figura del ratón, llega a la India un cuarteto de jóvenes llamado Los Feebles, quienes finalmente se hacen amigos de Pinky y éste deja a un lado el plan de conquista para pasar más tiempo con ellos.




En lo que a mi respecta, la joyita de este episodio es la estrategia que lleva adelante Cerebro para sacarse del medio a los Feebles y retomar el plan. Luego de conocer a una seguidora oriental del grupo, se la presenta a uno de sus integrantes, Jim Lemmon, quien se enamora perdidamente de ella. El amor entre Lemmon y Yoyo Nono (¿hace falta explicar algo al respecto?) termina por separar al grupo. Y lo que parecía un triunfo de los ratones en su carrera de dominio mundial, resulta ser otro fracaso cuando las fanáticas de Los Feebles los persiguen enfurecidas culpándolos por la separación.

En otra oportunidad, los ratones viajan a Smallvile y encuentran un mini cohete que acunaba ni más ni menos que al mismísimo Superman bebé. ¿Cómo no pensar en tratar de conquistar al mundo con la ayuda del super hombre?

Godzilla, el famoso monstruo japonés, es utilizado por Cerebro como un disfraz perfecto para destruir el mundo, sin éxito, claro está.

También podemos encontrar referencias a la figura de Napoleón en el personaje de Cerebro, que se hacen claras como el agua en un capítulo llamado "Napoleón Brainaparte".

Finalmente, y porque sólo podemos mencionar algunos episodios, los fanáticos de Star Trek pudieron relamerse con Cerebro recitando "Where no mouse has gone before", cual William Shatner -o el Capitán Kirk- abordándo un Enterprise que se alejaba lentamente en pantalla.

En definitiva, y como decía la canción central de la serie: Antes del amanecer desarrollarán su plan y cuando salga el sol, el mundo conquistarán. Son Pinki, son Pinky, son Pinky y Cerebro bro, bro, bro, bro bro....

lunes, 16 de noviembre de 2009

Nuevos y efímeros radicales

Por Verónica Fernández Ceriani

No, no se trató de una agrupación política, aunque en sus letras se reflejaban críticas sociales y en especial contra las corporaciones. New radicals (Nuevos radicales) fue una banda que surgió en 1998, encabezada -y básicamente conformada completamente- por el cantante, productor y compositor Gregg Alexander. Los demás miembros nunca fueron estables y por los escenarios en los que se presentaban desfilaron infinidad de guitarristas, bateros, bajistas y tecladistas. La formación con la que se grabó su primer y único disco, Maybe you’ve been brainwashed too (Tal vez a vos también te lavaron el cerebro), estaba integrada por Paolo Degregorio (guitarra y sintetizador); Allessandro Allessandroni (cuerdas); Greg Phillinganes, Richard Knowles, Paul Gordon, Mitch Kaplan (piano); John Pierce, Lance Morrison, Dan Rothchild (bajo); John Freese, Gary Fergusson, Josh Freese, Stuart Johnson, Tal Bergman, Matt Laug (batería); Juliet Prater, Richie Podler, Lenny Castro (percusión) y Danielle Brisebois (coros).



Como un nuevo ejemplar de one hit wonder, New radicals saltó a la fama con el tema You get what you give (Obtenés lo que das), que entre otras cosas llamaba a los adolescentes a tener un sueño, criticaba al capitalismo y les pegaba palos a músicos como Courtney Love, Marilyn Manson, Beck y Hanson, acusándolos de personajes marketineros y comerciales, y amenazándolos con “patearles el culo”. El éxito de You get what you give llevó a New radicals a la cima de los charts mundiales y a hacer tours por Estados Unidos y Europa. El tema Someday we’ll know fue el siguiente paso de un camino que ya había llegado a su fin, ya que New radicals dejó de existir justo después de rodar el video para este segundo single.








Fue menos de un año después del lanzamiento de la banda. Dejando a sus fans con una pobre colección de un único CD –claro, en los 90 no existían tantos DVD musicales con conciertos, videos y backstages para rellenar las estanterías-, Alexander decidió separarse del grupo, lo que era lo mismo que disolverlo, ya que New radicals era él. Así se hicieron realidad los rumores que hablaban de la separación después de algunos conciertos cancelados en Atlanta –Estados Unidos- y en Reino Unido. El bajo perfil y la personalidad tímida y sosegada de Alexander fueron las características por las que, dijo, no aguantó el ritmo de las giras, ni dormir tres horas en una cama distinta cada noche, ni el acoso de la prensa. New radicals fue el segundo intento del cantante de subirse a los escenarios y a la fama, pero al igual que la primera vez – seis años atrás como solista– no pudo contra la vorágine del protagonismo musical y decidió dedicarse de lleno a la producción y composición para otros artistas.


Así fue que Gregg Alexander se quedó oficialmente pelado –rasgo que para la época de New radicals se había acentuado profundamente contrastando con la melenita de 1992-, y acompañó desde su estudio a artistas como Santana, Sophie Ellis Bextor, Rod Stewart, Boyzone y Geri Halliwell. Su talento musical lo ayudó a cruzar fronteras idiomáticas y a trabajar también junto a muchos artistas españoles. El más conocido fue Enrique Iglesias, para quien compuso y produjo en su disco Seven. Para muchos de estos trabajos, el ex líder de New radicals dejó de lado su nombre artístico número uno y adoptó el seudónimo Alex Ander para alejarse todavía más de los googleos y permanecer en el anonimato.

Hoy es un misterio dónde está y qué está haciendo Gregg Alexander, o Alex Ander, o Gregory Aiuto –tal como lo bautizaron sus padres en 1970-. Hasta hace tres años el compositor tenía una página web para mostrar e informar sobre sus trabajos, pero ya no existe. Ni hablar de Twitter, Facebook o MySpace, en los que solo pueden encontrarse tributos de fans, páginas que se preguntan “¿Dónde está Gregg Alexander?” o sitios de seguidores del artista, cuyas últimas actualizaciones, en su mayoría, datan de 2007. Sin embargo, el legado que dejó New radicals, un solo tema, You get what you give, todavía sigue vigente musicalizando películas y publicidades. El ejemplo más reciente fue en Argentina, cuando no parábamos de escucharlo en cada promo de la marca de telefonía celular Movistar, durante 2008 y parte de este año.



miércoles, 4 de noviembre de 2009

ABARAJAME ESTA BANDA NENA

Por Claudio Sebastian Pronesti
La escena es la siguiente: son las siete de la mañana, estoy en la puerta del colegio secundario y faltan apenas minutos para entrar a otra dura jornada de segundo año en el “Remedios de Escalada de San Martín” del barrio de Flores. Mi amigo Paulo llega con sus auriculares puestos y mientras pega saltos – sí, eso no era caminar gente, eran saltos – alcanzo a escuchar algo de lo que viene murmurando, inentendible, raro, pero sin dudas lo suficientemente excéntrico como para llamar mi atención.

“Abarajame en la bañera, abarajame en la bañera”, ¿lo que?, “te digo y te repito, conmigo no te metas, mi click está creciendo alrededor del planeta, abarajame en la bañera, abarajame en la bañera nena”. Ah no no, este pibe se dio vuelta o está siendo víctima de una posesión no digo demoníaca, pero por ahí anda.


“Es Ilya Kuryaki & The Valderramas”, responde a mi pregunta sobre quienes eran esos que desde su walkman hacían agudizar mi oído más de lo normal, y sin darme cuenta, desde ese momento fui uno más de la tribu que daba saltos por la calle y movía sus manos como repartiendo cartas en el aire. CHACO (1995), tercer álbum de la banda integrada por Dante Spinetta (voz y guitarra) y Emmanuel Horvilleur, fue el punto de quiebre para este dúo de soul, funk, música alternativa o rock fusión (recibieron todas esas denominaciones) que durante la primera mitad de los noventas se animó a innovar a través de una estética particular, tan ajena al típico rocker argentino.

VERSUS (1997) trajo nuevas letras y un sonido más pop que la placa anterior, y canciones como “Jugo”, “Expedición al Klama Hama” o “Discovery Buda” no tardaron mucho en copar los ranking de las principales radios. Atrás habían quedado los poco difundidos FABRICO CUERO (1991), y HORNO PARA CALENTAR LOS MARES (1993), aunque de “FABRICIO…” el tiempo se encargó de rescatar otro hit, “Es tuya Juan”.

Dos años después, LECHE (1999) fue quizás su último trabajo en estudio que supo mantener la impronta de aquellos chicos que a comienzos de la década abarajaban sus manos y hacían saltar gente por las calles a las siete de la mañana. “Latin Geisha”, primer corte de difusión de la placa, marcó el último eslabón en la cadena de rock y raros peinados nuevos que los Kuryaki había impuesto años atrás.

Antes de la separación del grupo tras 11 años juntos, hubo un disco más: KURYAKISTAN (2001), con algunas reversiones de los mejores temas. Tiempo después, Emmanuel Hourviller logró imponerse como solista inclinándose por el pop, mientras que Dante Spinetta sigue en la rama experimental, aunque mechando algunas participaciones en discos de otros artistas, tal como lo hizo con Julieta Venegas.

La escena es la siguiente: es 1995 otra vez, son las 14 horas de un día cualquiera, y mientras mi amigo se va saltando con su walkman puesto, yo encaró hacia el Musimundo más cercano y adquiero - por una módica suma – mi primer disco de los Kuryaki. Ya nadie podrá decir que no sé mover mis brazos.

viernes, 23 de octubre de 2009

Es parte de la religión

Por Julieta Roffo

El 22 de diciembre de 1991 Charly García tocó en el Estadio Ferro, regalándole a más de 25 mil personas una seguidilla de temas impresionante, en un show en el que Fito Páez, Mercedes Sosa y unos incipientes Illya Kuryaki fueron sus invitados.

Charly cerraba un año marcado por su internación en una clínica de rehabilitación, por eso subió al escenario en ambulancia, y por eso la banda que lo acompañó (formada por Hilda Lizarazu, Fernando Samalea, Fabián Von Quintiero a.k.a. El Zorrito, Fernando Lupano, el Negro García López) fue bautizada "Los Enfermeros".

Hoy, día de su cumpleaños número 58, el dueño del talento musical más grande del rock argentino, vuelve a los escenarios del país - ya tocó en Perú y Chile - en el Estadio Vélez. Otra vez, después de internación, desintoxicación, rehabilitación y demás ciones que lo alejaron de su público durante un buen tiempo, y en medio de una expectativa gigantesca.

Varios de Los Enferfermeros lo van a acompañar, seguramente habrá invitados y probablemente, dentro de 20 años, un grupo de nostálgicos describirá esta noche en algún medio no inventado aún.

Mientras esperás que se hagan las 21, podés bajar el recital de 1991 de acá y ver varios videos acá.

"La vuelta del teacher, para siempre", dijo Fito Páez aquella noche, después de tocar nada menos que Peluca telefónica y No se va a llamar mi amor junto a García. Que así sea.

Say no more.

miércoles, 21 de octubre de 2009

El teléfono que supo ser "el celular del futuro"

Por Verónica Fernández Ceriani

Años atrás, cuando las fotos, los mp3, los videos y la pantalla color estaban limitados cada uno a su adminículo específico y nadie imaginaba que todos podrían estar juntos dentro de un teléfono, existió un equipo que fue el más moderno, la revolución en celulares y una joyita del diseño: el Motorola StarTac.

En diciembre de 1996 Motorola lanzó al mercado este teléfono que con apenas 88 gramos de peso y unas dimensiones de 98 por 57 por 23 milímetros se convirtió en el más pequeño de su época y abrió el camino para muchos nuevos modelos que adoptaron sus características como la línea a seguir en términos de evolución. El color negro, el dorado y luego el “rainbow” vistieron a este hito de la telefonía móvil.

Pero atención, lo magnífico del StarTac no terminaba acá. Este celular fue el primero con diseño Clamshell propiamente dicho, más conocido como “con tapita” y contornos redondeados –el paso previo fue el Motorola MicroTac, de 1989- y en permitir el por aquel entonces novedoso modo vibrar. Como si fuera poco, incluía un broche para colgarlo del cinturón sin necesidad de fundas y una batería que duraba alrededor de tres días. Su tamaño y peso, además, lo hacían ideal para “llevar en el bolsillo de la camisa”, como se promocionaba en los noventa. Según Motorola, el StarTac era el teléfono “listo para usar”, casi a modo de accesorio.

El éxito fue abrumador. A pesar de la novedad, su precio no estaba demasiado alejado de los teléfonos comunes en la Argentina y rápidamente Movicom –la compañía que lo comercializaba, hoy Movistar junto a Unifón- notó el ascenso en sus ventas. Es que en ese entonces, como ahora, todos querían el nuevo celular, y justamente el StarTac era EL nuevo celular.

No solamente para los usuarios el Motorola StarTac se ganó su lugar en el pedestal: la revista especializada PC World le otorgó el sexto puesto en la edición 2005 de su ranking de “Los 50 artefactos más grandiosos de los últimos 50 años”, y la revista Popular Science también le hizo sitio en su lista de "Los 100 mayores logros de la ciencia y la tecnología del año".

A pesar de haber sido superado por sus sucesores en cuanto a diseño, prestaciones y utilidades, los nostálgicos fanáticos –muy fanáticos- del StarTac tuvieron un momento retro entre 2004 y 2006, ya que Motorola Corea produjo una edición limitada del equipo en su décimo aniversario. Esta vez, mantenía su estética y contaba con tecnología 3G, pantalla color de 128 por 160 pixels de resolución, ringtones polifónicos y cinco carcasas intercambiables de color dorado, rojo, negro, blanco y azul. Y aquellos fanáticos –recalquemos nuevamente: muy fanáticos- pudieron adquirirlo por una suma de entre 1.600 y 2.000 dólares, solamente en el mercado coreano.

Lo que significó el StarTac según Motorola
“En 1996 la empresa Motorola revolucionó el mercado de la telefonía celular con el modelo StarTac. Reconocido luego como el mítico equipo de Motorola, pesaba 88 gramos y tenía el tamaño de un “pager” o “radiollamada”. La compañía lo identificó con la frase “listo para usar”, comparándolo con un accesorio que podía lucirse cómodamente en el cinturón del pantalón o colgar en el cuello como una joya más. La creación del StarTac era el primer paso hacia la evolución del diseño”.

El salón telefónico de la fama
Motorola confeccionó una línea de tiempo con la evolución del teléfono celular que actualiza constantemente. En el año 1996, el StarTac se aloja bajo el slogan “Pruébate este teléfono”.

1996

Pruébate este teléfono
Teléfono StarTAC de Motorola para llevar puesto.

El innovador StartTAC de Motorola ha sido designado como uno de los "100 Mayores Logros de la Ciencia y la Tecnología del Año" por la revista Popular Science. Permitía que los usuarios lo lucieran en su cinturón, por su tamaño diminuto y comparable al de un localizador, con un peso de sólo 3,1 onzas. Los usuarios podían disfrutar de hasta 4 horas de conversación continua o hasta 47 horas de tiempo de reposo”.

Sin dudas, uno de los teléfonos más míticos de Motorola, con características que la mayoría de los actuales no ha podido superar, como la impecable señal, la carcasa resistente a golpes y el funcionamiento a prueba de sumersiones varias.

Agradecemos por información e imágenes a Ariel Pérez de Colombo Pashkus y a Danielle McNally - Motorola Media Center

lunes, 19 de octubre de 2009

El dentista que dió el mal paso

Por Sabrina Campos

Pero un día me cansé de esperar
Ya no quería seguir volviéndome insano.
S
e burlaron de mí y ahí nomás les disparé…
Si volviera a nacer lo habría intentado otra vez.
Attaque 77 - Barreda's Way



"Andá a limpiar, que los trabajos de conchita son los que mejor hacés", dijo Gladys Mc Donald poco antes de morir. Hablaba con su marido, su asesino, o como ella le decía: Conchita.
Ese 15 de noviembre de 1995, tuvo lugar uno de los crímenes que más convulcionó a la sociedad local, el odontólogo Ricardo Barreda asesinó en su casa de la ciudad de La Plata a su mujer (57), sus dos hijas (26 y 24) y a su suegra (86).

Una vez cometido el crimen, Barreda desordenó la casa, desparramó papeles y armó una escena que no lo perjudicara: un robo. Fue hasta el centro de la ciudad y tiró los cartuchos de la escopeta que había usado, una Sarasqueta calibre 16.5, en una boca de tormenta y luego manejó su Ford Falcon hasta Punta Lara, donde se deshizo del arma. Fue entrada la medianoche cuando volvió a su casa, y ahí, entre los cuerpos desparramados, llamó a las ambulancias y a la policía para contarles la historia del supuesto robo.

¿Loco o gran simulador?

Ya trasladado a la seccional 1 de la ciudad de las diagonales, Barreda insistió con la teoría del robo hasta que un párrafo del código penal sobre personas no punibles lo iluminó. El artículo 34 hizo que el odontólogo admitiera su culpabilidad.

En diálogo con De Los 90s, la psicóloga y docente de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Fabiana Sgromo, explica que no son inputables por insuficiencias o alteraciones morbosas de sus facultades, por estado de inconciencia y su incapacidad de comprender la criminalidad de sus actos.
"En cuanto a Barreda en sí, sin la pretensión de arribar a un diagnóstico psicológico, en virtud del caso, podríamos pensar en la presencia del un cuadro psicopático", sostiene Sgromo.

Si bien la estrategia de la defensa fue la de declararlo ininputable, el dentista fue condenado en 1995, a cadena perpetua. Luego de 13 años de cárcel, y gracias a su buena conducta y al noventoso 2x1, Barreda consiguió el arresto domiciliario en 2008.



Vida nueva, novia nueva

Mas allá de lo que el imaginario colectivo pudiera pensar, el condenado por asesinar a sangre fría a su familia, rehizo su vida amorosa con la compañía de Berta André, quien además de ser su pareja, es la garante de su detención domiciliaria.

Para otorgarle este beneficio, y dado el antecedente penal de Barreda, la Sala I del Tribunal de Casación Bonaerense, impuso como requisito fundamental un seguimiento psicológico y contención para él y su cónyuge, ya que el informe presentado por el Patronato de Liberados marcaba la existencia de "algunas ambigüedades y reservas".

"El mayor peligro es la cosificación del otro, la pérdida de entidad de un igual como persona y semejante, sumado a la incapacidad de asumir una responsabilidad a través de la sentencia de que son los demás los que los hacen fallar", describe Sgromo al respecto de las características del posible cuadro.

Las más recientes noticias sobre Ricardo Barreda afirman que el odontólogo violó su prisión domiciliaria para ir a comprar pan con su pareja. Aunque luego de asentada dicha denuncia, su abogado negó la acusación que, de ser cierta, significaría el regreso del homicida a la cárcel.

Hazte fama... La imágen pública

La psicóloga y docente de la UBA Alejandra Ibáñez, adhiere a lo antes expuesto por Sgromo, pero además realiza un interesante análisis de la reacción social, frente al asesinato cometido por Barreda. "Es sumamente llamativa la fascinación que este tipo de personajes crea en el entorno social. He encontrado blogs y artículos donde es considerado un héroe, una víctima indefensa de una familia que lo humillaba, y de la cual, según parece o asumen muchas personas, no podía alejarse por medios socialmente aceptados como el divorcio, alejamiento del hogar, denuncias, etc", sostiene Ibáñez.

En una extraña y extrema defensa del género, los hombres terminan avalando el asesinato de una familia, como una venganza que representa a la fraternidad de hombres oprimidos por sus supuestas mujeres enemigas.



¿Qué nos queda entonces a las mujeres, enarbolar quizás, la bandera de Lorena Bobbit?
Quien sabe, de cualquier modo, le dejamos a todos los noventosos que sientan un poco de empatía con el Señor Barreda, un link para que puedan descargar el disco "Antihumano" de Attaque 77 que incluye el tema Barreda's Way, contando la historia del sanguíneo odontólogo.
Recomendamos escucharla apenas salen de la oficina, camino a casa. Porque recuerden que la música, calma a las fieras.

viernes, 9 de octubre de 2009

Entrevista con Leonardo Greco, la cara de Disney en la Argentina de los 90

Por Verónica Fernández Ceriani

Octubre de 2009, bastó un simple “hola” de Leonardo Greco para que mi mente retrocediera casi veinte años en dos segundos y me situara en el living de mi casa, donde se ponía la mesa mientras yo me instalaba frente al televisor sin intención de moverme durante un buen rato: era la hora de El mundo de Disney.

En 1990, el programa comenzó como una idea de Gustavo Yankelevich, con formato propio, presentando material exclusivo de Disney –tanto el antiguo como el más novedoso- y conducido por un locutor de grandes bigotes y cara desconocida, aunque su voz ya contaba con presencia en la TV y con un Martín Fierro por su trabajo radiofónico. Leonardo Greco, quien le había prestado su voz a Pelín – el oso koala amarillo que secundaba a Flavia Palmiero en La ola está de fiesta- ahora se sentaba detrás de un escritorio sin más compañía que muñecos de personajes de Disney y a la espera de que el formato ideado por Gustavo Yankelevich diera resultado.

“Gustavo Yankelevich estaba por segunda vez en la dirección artística de Canal 11, esta vez ya siendo una empresa privada llamada TELEFE. Pensó una fórmula que sea importante para un horario en el que en todos los canales daban lo mismo: noticias. Y decidió ofrecer otra opción, una opción para el niño, que a esa hora todavía tenía el dominio del control remoto. Al primer día El mundo de Disney empezó a ganarles a todos los noticieros y después ya eran palizas de 32, 35 puntos de rating”, recuerda Greco en uno de los estudios de Magazine, canal en el que ahora trabaja como panelista de Yo amo a la TV.

El éxito de El mundo de Disney fue inmediato porque su público terminó siendo un poco más amplio que el que inicialmente se pensó: los grandes también lo miraban. Greco enumera: “Se juntaban el abuelo que lo veía de chico en el cine, más el papá que lo veía cuando yo lo veía los domingos a las siete de la tarde, Disneylandia, con la conducción de Walt Disney, más los chicos, que recién lo descubrían”. Claro, nada de esto fue casual. Además de presentar los clásicos dibujos y películas de Disney y armar especiales en fechas como el día de los enamorados, el mundo de Disney traía por primera vez a la Argentina series como Dinosaurios y Blossom.

Cuatro meses después del lanzamiento de El mundo de Disney por TELEFE, Walt Disney Company quiso saber de qué se trataba un programa que ponía al aire sus producciones sin seguir el clásico formato Disney. Greco recuerda: “La cosa era que había un distribuidor que compraba ese material de Disney y lo podía poner donde quisiera. Ellos vinieron y vieron. Se encontraron con tal éxito, con un programa que devolvía a Disney a la Argentina, que mejor no tocarlo. Disney entonces colaboró con nosotros para que el envío salga bien, nos abrió las puertas de los parques, hicimos una sociedad maravillosa”.

Más que la infinidad de viajes y los innumerables puntos de rating, el recuerdo más valioso para Leonardo Greco es la reacción de los chicos: “Había un encanto especial al que yo no estaba acostumbrado. No había trabajado para chicos, excepto esa vez con Flavia pero era por interpósita persona: abrazaban a Pelín -dentro del cual había una bailarina-, pero me veían a mí por la calle y no era nadie. En este caso sí, me reconocían, era muy grato, era muy tierno, me traían cartas, me preguntaban cosas. Porque además me veían en los parques, que yo interactuaba con los personajes, y me preguntaban por ellos, les mandaban mensajes. Después, a nivel padres, mucho respeto, mucho cariño”.

A pesar de haber dejado de trabajar para el público infantil hace tiempo, Leonardo Greco describe como “un sueño” poder volver a hablarles a los más chicos: “Me encantaría. Y mostrar todas las cosas que nos rodean más allá de la Play Station. Hay un montón de cosas en este planeta que son lindas de ver, de saber que están”. Proyectos, por ahora dos programas en Gambling TV –uno de truco y uno de pool- y una idea que da vueltas en su cabeza y que algún día puede llegar a ver la luz: “Poder presentar nuevamente en televisión abierta algunas cosas de Disney que no están, casi como una promoción del Disney Channel, pero ya con mis hijos, que sean dos generaciones. Yo puedo hacer un enunciado, pero que ellos cuenten con el idioma que tienen los chicos lo que estamos por ver. ¡Y somos otra vez los Greco jodiendo a la gente!”

Apertura de El mundo de Disney (1991)

martes, 6 de octubre de 2009

Al lado de la puerta del infierno

Por Julieta Roffo


No, no nos convertimos en un blog renacentista. No vamos a hablarte ni de La República de Platón, ni de La Política de Aristóteles, ni de La Escuela de Atenas, el fresco imponente que Rafael perpetuó en una de las salas más visitadas de los Museos Vaticanos, en Roma.

Pero, noventoso, ¿no hay nada que te llame la atención en la pintura? ¿Un detalle que te haga volver al futuro, desde el siglo XVI hasta hace unos pocos años, no más? Te lo marcamos para darte una pista... ¿No te suenan ese muchacho tomando algunos apuntes y ese hombre, apoyado en esa columna jónica / dórica / corintia, chusmeándolo?


El doblete Use your illusion I y II, discos que los Guns N' Roses editaron en 1991, es la respuesta al enigma.

Un poco de historia

La banda californiana compuesta originalmente por Axl Rose - que esta cronista escuchó definir como "el único colorado que calienta" -, Slash, Izzy Stradlin, Duff McKagan y Steven Adler, ya se había posicionado, desde la salida de Appetite for destruction en 1987, en el mainstream de la música, primero norteamericana, luego mundial. De hecho, el primer trabajo de los Guns N' (fuckin') Roses, que incluía hitos como Welcome to the jungle, Sweet child o'mine y Paradise city es, luego del de los míticos Led Zeppelin, el disco debut más vendido de la historia.


En 1988 llegaría GN'R Lies, y en medio de giras propias o como soportes de bandas como los Rolling Stones, los 90's encontrarían al grupo con varios de los requisitos rockeros cumpliéndose: algunos arrestos, un par de escándalos televisados que derivarían en una disputa con MTV, ingresos a programas de desintoxicación y el reemplazo de algunos miembros por otros, como la llegada de Matt Sorum, que ocupó el lugar de Adler en los platillos.

UYI I y II, un emblema de los noventas

El 17 de septiembre de 1991, luego de varios meses de grabación y edición, salieron a la venta los Use your illusion, que se mantuvieron en el 1º y 2º puesto de los charts de ventas mundiales durante 108, sí, 108 semanas, y que vendieron, entre los dos, más de 40 millones de copias en todo el planeta, convirtiéndose en dos álbumes fundamentales, no sólo de la década, sino de la historia del rock internacional.

Sin abandonar el hard rock que los caracterizaba desde sus inicios, los Guns se permitieron incluir elementos de blues, de country y hasta de música clásica en sus nuevas placas. November rain, Don't cry y Estranged son los temas que más popularidad cobraron y que dieron un lugar a la banda en ámbitos ajenos a los que estaban acostumbrados, ampliando su público.


En el disco I - caracterizado por un sonido más pesado, mientras que el II es más suave y melancólico - se incluye un cover de Live and let die, el tema que Paul McCartney, junto aWings, había popularizado en la banda sonora del film homónimo de James Bond. En el II, hay una ya famosa versión de Knockin' on heaven's door, escrita en 1973 como la anterior, pero por Bob Dylan.

“Es una cachetada revitalizante ante el reinante fascismo de la perfección de estudio”, dijo la crítica de Rolling Stone sobre un trabajo que, además, contó con importantes invitados, entre los que destacan Shannon Hoon (Blind Melon) y Alice Cooper.

Get in the ring, motherfucker

Ese fue el nombre con el que los Guns N' Roses bautizaron a la gira de presentación de los Use your illusion. Entre el 24 de mayo de 1991 - antes del lanzamiento de los discos, que había sido postergado - y el 17 de julio de 1993, la banda se presentó 192 veces en 27 países distintos, ante un total de 7 millones de seguidores. Recorrió, en varias ocasiones compartiendo el tour con Metallica, los Estados Unidos, Europa, Asia, Oceanía ySudamérica, donde decidió realizar su última presentación en vivo - con la formación histórica - en el Estadio de River.

Aunque no eran idénticos, los shows de la gira - que incluían antológicos solos del hombre-de-la-galera - solían empezar con Welcome to the jungle, It's so easy o Nightrain, y terminaban generalmente con Paradise city. Contaron con bandas como Soundgarden, Faith no more y Smashing Pumpkins como soporte y en varias ocasiones interpretaron covers de los Misfits, de los Rolling Stones y de John Lennon.

Las demoras, los shows cancelados, los conflictos internos, la "conducta rockera" de los californianos, les generó críticas negativas de la prensa y la excesiva precaución de algunos de los países que los recibieron.

En la Argentina

5 y 6 de diciembre de 1992 fueron las fechas elegidas para la presentación de la banda en la Argentina. El país no fue ajeno a la dureza con la que se venía "previniendo" la presencia de los Guns N' Roses en Sudamérica (la volanta del titular despeja todas las dudas). Algunos incidentes en Bogotá, Colombia, y el (falso) rumor de que los integrantes del grupo habían prendido fuego una bandera argentina en París fueron los disparadores de las críticas.

El entonces presidente Carlos Menem calificó de "forajidos" a los californianos y desalentó la asistencia a los recitales, que, sin embargo, fueron multitudinarios y contundentes. Se registraron, no obstante, dos incidentes alrededor de aquellas fechas en el Monumental: el primero fue el suicidio de Cynthia Tallarico, una joven de 16 años, fanática del grupo, cuyo padre - quien también se mató - le prohibió asistir al recital; el segundo fue la fractura - sobre el escenario - de tibia y peroné del incipiente Juanse, que junto a los Ratones Paranoicos fue uno de los soportes del show.

Volvieron a River el 16 y 17 de julio de 1993, para culminar la gira que para ese entonces había cambiado su nombre a Skin N' Bones Tour. La noche del 17, ante 80 mil personas, el concierto incluyó un set unplugged y se convirtió en el último recital de los Guns N' Roses con sus integrantes tradicionales, cobrando un valor muy especial en la historia de la banda.

Noventoso, ya sabés, en tu batea no pueden faltar los Use your illusion. Así que conseguite un boxer con la bandera británica, una pollera escosesa, un inolvidable meneo de caderas y escuchalos bien fuerte... Y si no los tenés, bajalos de acá:

http://www.taringa.net/posts/musica/2166865/guns-and-roses-[use-your-illusion-1-y-2]-(-en-un-link-).html


Agradecimiento especial al hiper-noventoso Martín Filipić, de http://cuatrodepunta.blogspot.com/