Por Julieta Roffo
Nirvana, Vilma Palma y la Macarena, de Los del Río. Bittersweet Symphony, las boy-bands y El amor después del amor. Todos grandes hitos de la música, con base de operaciones en la década de los 90. Esa época en la que el CD hacía furor, y en Musimundo había que hacer cola.
De todo pasó, en el mundo, para que hoy recordemos discos, artistas y canciones de aquellos años maravillosos. En la Argentina, se consagraron las bandas de mayor convocatoria del rock, como La Renga y Los Piojos, y especialmente Los Redondos. Matador y Mal Bicho le dieron a Los Fabulosos Cadillacs su lugar en Latinoamérica y Fito Páez lanzó – en 1992 y para Cecilia - el disco que más se vendió en la historia del rock nacional. Fue la época de Gilda, de Ráfaga, de Red, de Green, de La ventanita del amor y de hits inolvidables como La Pachanga o Auto rojo, que aún hacen explotar a varios nostálgicos.
En Estados Unidos, en la ciudad de Seattle, se originó el movimiento grunge que no tardó en reclutar a miles de jóvenes uniformados con bermudas y camisas escocesas, y en cambiar la historia de la música. Aunque su ícono más reconocible es el disco Nevermind (1991) de Nirvana, incluyó a bandas como Alice in chains, Stone Temple Pilots, Soundgarden y Pearl Jam, la única que se mantiene unida desde aquella época.
Allí mismo, los Guns and Roses lanzaron su disco doble, Use your illusion (1991), y los Blind Melon vistieron de abejita a una niña de anteojos y algo gordita - cualquier semejanza con Little Miss Sunshine es pura coincidencia - para el videoclip de No rain, un himno noventoso por excelencia. Desde Canadá, Alanis Morissette hizo lo suyo, sobre todo desde la aparición de su disco Jagged little pill en 1995.
Radiohead, Oasis, Blur, Beck, The Cranberries y Roxette invadieron los escenarios europeos. Algunos duran hasta hoy, otros se han disuelto y hasta reunido para reconciliarse, y otros, dicen, se agarraron a piñas tras bambalinas hace unos días, y ahora sí, los Gallagher se separan. Pero… ¿Vos te vas a olvidar de Don’t look back in anger, de Paranoid Android, de Linger o de It must have been love? No, esas huellas noventosas están grabadas en nuestras memorias.
Como las boy-bands, que lideradas por los Backstreet Boys, y seguidas por N’Sync, Five, Westilfe y Take that enamoraron a millones de gritonas alrededor del mundo, y las llenaron de pósters, gorros, banderas y vinchas. O como los galancetes en español: Ricky Martin, Enrique Iglesias, Ricardo Arjona, Alejandro Sanz, que también cultivaron el llanto de varias quinceañeras.
De todo ha pasado, melodías dulces, duras, pegadizas, sin sentido o con letras de esas que te dejan pensando. Pero eso sí, la música de esta década no pasará desapercibida, y cada vez que suene Tractor amarillo, de Zapato Veloz, Mmmbpop de Hanson, Inundados de los Paralamas o Enter Sandman de Metallica… ya sabés de dónde viene. Y si te agarra la nostalgia bien fuerte, desempolvá el casette en el que grabaste los 40 principales y cantá bien fuerte, con la compañía de Fonito.
2 comentarios:
De todo lo que perdimos en el camino que mas nostalgia me genera es la compra del CD, el original, abrirlo en la calle ni bien salia del musimundo... ya no pasa.
Claro que sí! Estar en la cola para pagar y mover el CD para que el holograma con el mundito se moviera...
Bien noventoso!
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